Derrama en una comunidad de propietarios

Aun así, entender qué es una derrama y cómo funciona es muy importante para la correcta administración y mantenimiento de los edificios residenciales, también deben conocer el concepto los propietarios, que serán los principales afectados. En este artículo, exploraremos a fondo qué es una derrama, cómo se aprueba, cuándo es obligatorio pagarla y mucho más.

¿Qué es una derrama de una comunidad?

Una derrama en una comunidad de propietarios es una cuota extraordinaria que se impone para cubrir gastos imprevistos o no presupuestados que superan los gastos ordinarios. Estas cuotas adicionales son necesarias para asegurar el mantenimiento adecuado del edificio y sus instalaciones comunes.

Las derramas pueden generarse por diversas razones, como reparaciones urgentes, mejoras estructurales o mantenimiento inesperado. Por ejemplo, arreglar una fachada deteriorada, sustituir un ascensor averiado o actualizar el sistema eléctrico del edificio.

¿Cómo se aprueba la derrama de una comunidad?

El proceso para aprobar una derrama empieza con la convocatoria de una junta de propietarios. Durante esta reunión, se presenta la necesidad de la derrama y se discuten los presupuestos para la obra o reparación requerida. La aprobación de una derrama requiere un consenso que varía según el tipo de obra:

• Instalaciones o mejoras no necesarias: Se necesita el voto favorable de 3/5 de los propietarios presentes, representando al menos 3/5 de las cuotas de participación.
• Infraestructuras comunes (telecomunicaciones, energía renovable, etc.): Basta con el voto afirmativo de 1/3 de los propietarios presentes y que representen un tercio de las cuotas de participación.

¿En qué casos es obligatorio pagar derramas de comunidad?

Las derramas, siempre que hayan sido consultadas y aprobadas en una junta de vecinos, son de pago obligatorio. Pero, ¿cuándo exactamente no puedes evitar pagarlas?

Si la derrama es para rehabilitar el edificio, mejorar un elemento importante o realizar obras que garanticen la seguridad y habitabilidad del inmueble, estás obligado a pagarla. Por ejemplo, esto incluye reparaciones de la fachada, sustitución del sistema de calefacción o instalación de sistemas contra incendios.

Además, si se trata de eliminar barreras arquitectónicas e instalar rampas, ascensores o plataformas para mejorar la accesibilidad del edificio, también debes hacerte cargo de la derrama.

En general, la Ley de Propiedad Horizontal establece que todos los propietarios deben contribuir a los gastos necesarios para el mantenimiento y mejora del inmueble. Esto incluye tanto los gastos ordinarios como los extraordinarios que no se puedan individualizar. Por tanto, si eres propietario en una comunidad, prepárate para asumir estas derramas.

¿Cuándo puedes negarte al pago de las derramas?

El pago de una derrama es obligatorio para todos los propietarios de una comunidad, y no cumplir con este pago acarrea las mismas consecuencias que no pagar las cuotas ordinarias.

Un propietario moroso no puede ser privado de los servicios comunes, pero la comunidad tiene derecho a exigir el pago. El proceso habitual comienza con un requerimiento amistoso. Si este no es atendido, la comunidad puede iniciar un proceso monitorio para reclamar judicialmente la deuda.

En el caso de derramas para obras o instalaciones estéticas que no son necesarias para la seguridad del edificio, los propietarios pueden negarse a pagar. Para ello, deben haber votado en contra de la derrama durante la junta de vecinos convocada para su aprobación.

¿Cómo se calcula una derrama en una comunidad?

El cálculo de una derrama se basa en varios factores:

• Coste total de la obra o reparación: Incluye todos los gastos necesarios para completar el proyecto.
• Coeficiente de participación: Cada propietario paga según su porcentaje de propiedad en el edificio, definido por el coeficiente de participación.

Por ejemplo, si la reparación cuesta 10.000 € y un propietario tiene un coeficiente del 10%, su contribución sería de 1.000 €.

¿Puedo pagar una derrama a plazos?

Sí, es posible pagar una derrama a plazos si así lo acuerda la junta de propietarios. Este acuerdo debe ser aprobado en la reunión y detallará los términos y condiciones del pago fraccionado. Esto puede facilitar a los propietarios afrontar gastos imprevistos sin causarles dificultades financieras.

¿Qué sucede si no se paga la derrama obligatoria?

Es importante destacar que la falta de fondos personales no es una excusa válida para no pagar una derrama. La ley obliga a todos los propietarios a hacer frente a estos pagos, siempre que la derrama haya sido aprobada en junta. En caso de incumplimiento, se pueden tomar medidas legales, incluyendo el embargo de cuentas, tal como establece el artículo 592 de la Ley de Enjuiciamiento Civil (LEC).

¿Quién paga la derrama en un alquiler?

La responsabilidad del pago de una derrama en el contexto de un alquiler depende del contrato de arrendamiento. Hay dos formas de acordar el pago de la derrama en un alquiler en un contrato.

Si se hace sin especificaciones, quiere decir que en el contrato no menciona la responsabilidad de las derramas, entonces será el propietario debe asumir el coste.

Si se hace un contrato especificando pagos, puede ser que se estipule que el inquilino sea quien pague la cuota de la comunidad. Pero si no menciona nada de derramas, generalmente es el propietario quien debe pagar.

Ahora que ya conoces los procedimientos de aprobación, las obligaciones de pago y las posibles exenciones, sabes que si eres propietario tendrás que estar al tanto de las noticias de la comunidad. Una adecuada gestión de las derramas garantiza la conservación del patrimonio común y previene conflictos entre vecinos.

¿Quién paga la derrama en un alquiler?

La responsabilidad del pago de una derrama en el contexto de un alquiler depende del contrato de arrendamiento. Hay dos formas de acordar el pago de la derrama en un alquiler en un contrato.

Si se hace sin especificaciones, quiere decir que en el contrato no menciona la responsabilidad de las derramas, entonces será el propietario debe asumir el coste.

Si se hace un contrato especificando pagos, puede ser que se estipule que el inquilino sea quien pague la cuota de la comunidad. Pero si no menciona nada de derramas, generalmente es el propietario quien debe pagar.

Ahora que ya conoces los procedimientos de aprobación, las obligaciones de pago y las posibles exenciones, sabes que si eres propietario tendrás que estar al tanto de las noticias de la comunidad. Una adecuada gestión de las derramas garantiza la conservación del patrimonio común y previene conflictos entre vecinos.